El encuentro erótico sucede cuando los pubis de ambas mujeres se frotan entre sí, vulva contra vulva o con cualquier otra parte del cuerpo. Es una postura donde, una sobre otra o acostadas de lado, juntamos los pechos y las pelvis, entrelazamos las piernas, unimos las caderas y nos sumergimos en una danza húmeda, entre suave y frenética, de fusión y excitación.
Si los cuerpos son anatómicamente afines entre sí, (compatibilidad del ancho de caderas) se alcanza el perfecto rozamiento de clítoris con clítoris, punto culminante del tribadismo. Los labios vaginales, al rozarse, provocan una humedad caliente, que hace audibles los sonidos del rozamiento.
Otras partes que pueden rozarse son el clítoris de una con los senos, nalgas, muslos, pies, la cadera de la compañera. Una postura tradicional, “la tijera”, sucede cuando unidos los pubis, las amantes se enfrentan desde los dos lados opuestos, viéndose los rostros.
El Tribadismo es un ejemplo de sexo entre mujeres, sin “pene-tración” y donde no hay roles ‘masculinos’ o ‘femenimos’ ni ‘activos’ o‘pasivos’. Una huída del falocentrismo y un poético reconocimiento del arribo a casa.
¿Cómo desarrollas tu erotismo? Si quieres hacer una pregunta prohibida o expresar algo que pensaste pero nunca te animabas, tal vez éste sea el momento de hacerlo.