¿Cómo hacerlo? Esa parece ser la pregunta que inquieta a muchas. ¿Cómo le digo a 'ELLA' lo que siento? ¿Cómo me expreso para no perderla? ¿Y si lo hago correctamente, pero aún así la pierdo?
En esta sociedad heterosexista se supone que es el hombre quien intuitivamente 'sabe' cortejar a la mujer. ¿Una mujer sólo sabe ser 'seducida' e ignora completamente cómo seducir a otra mujer?
¡Qué pesada herencia! Ser pasivas, encontrarse sin recursos, dar eternos rodeos sobre sí mismas.
Lo que propongo, quizá algo poéticamente, es:
"Tienes 24 horas para enamorarla" ¿Qué sucede si todo se precipita y quedan sólo 24 horas antes que el 'Titanic' se hunda?
¿De qué manera enamorarías a una mujer?
Voy a encolumnar, entonces, algunas ideas:
En primer lugar, no imitando la parquedad ni la tosquedad de un hombre ni importar roles que no nos identifiquen.
Sin generalizar, pero una gran mayoría masculina desatiende completamente la esencia femenina. Y las mujeres acaban por acostumbrarse tristemente a ello.
§ Toda mujer agradece ser escuchada. Hay que vencer el primer impulso de ‘contarlo todo’ sobre nuestra vida y dar paso, por el contrario, al conocimiento pausado de la mujer que te interesa.
§ Una dama, se reconoce en los pequeños detalles. Sorpresas diarias. Suelo dedicar poesías de las más variadas como forma de iniciar la jornada y culminarla. Trato que las sorpresas no se tornen repetitivas para no caer en la costumbre.
§ Me enamora (y creo que a vosotras también) la palabra de una mujer envolvente, sagaz, refinada y creativa. Suelo intentar responder con el mismo criterio.
§ El ‘Titanic’ –como ya sabemos- ha sido propuesto meramente como metáfora para aquellas que suelen demorar meses en abordar a otra mujer: resulta raro las demoras cuando todo debiera ser fluido en la comunicación y sobre todo, tratándose de dos mujeres que se atraen mutuamente.
§ Escuchar a la mujer de tu agrado pero no con el fin de mimetizarte o imitarla. No abandones nunca tu identidad real y que hablen tus gestos, acordes a tus palabras. No inventes una personalidad que no tienes, porque el engaño no será sustentable en el tiempo.
§ Suelo ser puntual. Jamás dejes a una dama esperando. No agradan -para nada- las mujeres impuntuales. Es una falta de consideración y una descortesía innecesaria.
§ Trata de no recaer en la imitación de una 'relación hetero' difundida por Hollywood. Una cena en un lugar que imante y emane arte, me parece más apropiado junto con la mujer apropiada.
§ Deja que te seduzcan, para dar oportunidad a la mujer que te inquieta a expresar de sí, sus cualidades femeninas.
§ No es conveniente los lugares muy cerrados. A muchas mujeres tímidas o con poca experiencia, las relaja los sitios naturales. Organizar una breve excursión de dos, facilita el conocimiento mutuo.
§ Humor... más humor y hacer que poco a poco ella ingrese a tu vida y tú, a la suya con la naturalidad de la risa.
§ Todo el cuerpo y la piel de la mujer es zona erógena (cuestión casi desconocida absolutamente por el hombre). Se puede hacer el amor a su inteligencia, mediante la palabra o con el canto de una mano que solo se desliza… sin querer…
((Que estas reflexiones, junto a otras propuestas de otras lectoras, vayan a tu ayuda.))
